Tragaluz
Atraviésame tu amor sin recelo ni
cuidado
Que un día comprenderás el silencio de
mis labios
Y querrás callar a mi lado y contemplar
lo desolado
Pues más palpitar en ningún corazón será
hallado.
Abrázame despiadada noche y llora
consiente de este amor
Que tan tuyo es como de nadie en la fría
soledad
Y dime quimera exótica tus ayeres
mientras te admiro,
Pues mis seductores ojos te atesoran una
eternidad.
Si aún con un canto fidedigno no te has
de convencer,
Déjame llorarte sin sentido, amarte y venerarte,
Como lo hubiese hecho por una divinidad,
Solo desgájame en tus piernas,
desvanéceme nomas.
Si aún recordase el instante en que
despuntas las estrellas
Y trato de amarte una vez mas, déjame
salvarme solo un día
Déjame seducir tu indiferencia aún sin
ser capaz,
Pues honrado he de ser incluso si no
miras más atrás.
Después de haberme rechazado insólita
donante
Decidiré escupir en mi camino, así, no
pisarás por el,
Y has de comprenderme hermoso mito
viviente
Que ya nada ha de atravesar en este
cuerpo inerte, nada más la soledad.
Hovanna Antonio López
No hay comentarios:
Publicar un comentario